Tras la Invocacion

Invitado

Ya habían pasado varios minutos o hasta quizá horas desde que se dió en aquella sala oscura la invocacion, aquel que conocían bajo el nombre de Fuyuki. El escenario en ésta oportunidad era una interesante templo, situándose especificamente en el descampado de la misma donde al parecer ya había una figura haciendo acto de presencia.

Fue entonces cuando una obstruyente luz se abrío camino detrás de un gran sello de color y forma tenebroso. Sin embargo, no pasaría mucho tiempo para que revelara aquel ser su identidad destacando su compostura serena, rostro frío y aquella cabellera tan blanca como la nieve y brillante como la Luna que a su vez emitia unos invisibles cascabeleos gracias a las pequeñas decoraciones que colgaban de ella.

El personaje, reconocible para los presentes como Kyuzo Haptism, comenzó a caminar ligeramente hasta quedar a la altura de los demás, manteniendo su mirada brillando en todo minúsculo momento...

Tu... ¿Eres mi Master?

Aquello fue mas un susurro que otra cosa, sin embargo la sonrisa maquiavelica que enbozo aquel hombre que le habia invocado, dio a entender que si, lanzando una gran carcajada en señal de afirmacion

Invitado

En efecto, y tu eres mi Servant, seamos realistas, eres quien me llevara al santo grial, tu..., Luego yo usare su poder, para diminar el mundo... jajajaja

Aquellas palabras parecian plagadas de odio y malicia, aompañadas de una maquiavelica sonrisa el rostro del Master se frotaba las manos, totalmente confiado de sus objetivos, fue en ese momento cuando este se aproximo nuevamente hacia su recien invocado Servant, echandole una pequeña mirada.

Que tipo de Servant eres.....

Kyuzo por su parte le devolvio la mirada con sumo vacio, la verdad es que sabia que este no seria su master adecuado, aunque el demostraria lo contrario en breve, por su parte Kyuzo dejo salir un suspiro y sin mas de limito a responder, dejando salir una tenue voz de sus escondidos labios.

Assasin...

Invitado

Tsk mas te vale no seas debil, me ha costado mucho conseguir este libro para poder aprender hechiceria, debes saber algo, yo soy el lider aqui, soy el unico que toma deciciones, no tu... Asi que... ¡Eh!

Se detubo ahi, remendando el silencio que desde un principio reinaba, y es que una voz, o mas bien un gemido se habia dejado oir, era de parte de una pequeña niña la cual se ocultaba con un arbol, totalmente asustada al ser protagonista de los acontecimientos hasta ahora ocurridos. Kyuzo se mantubo totalmente callado, observando que haria su nuevo Master, sin embargo por la exprecion de este, no seria nada bueno.

Tsk, tu madre no te enseño a no meter a nariz donde no te llaman...

Dijo que fiereza sosteniendo a la niña agresivamente sobre sus ropas, poco despues la tiro al suelo, enfocando asi la vista en el ausente Kyuzo que parecia inmerso en sus propios pensamientos...

Tu... Matala...

Invitado

Kyuzo no se inmuto por las palabras y acciones de aquel sujeto, simplemente se limito a observarle fijamente mientras se manenia en absoluto silencio, aquella orden de aquel hombre fue bastante seria y contundente aunque solo habia una decision posible.

No... Si quieres que lo haga, usa una de esas marcas...

Sentecio secamente, negandose rotundamente a las ordenes de su Master, Kyuzo era asi, le importaba poco lo que el le pidiese, sin embargo aquellas marcas podian obligarlo y asi queria que fuese pues no haria nada asi, al menos no por propia voluntad

Acaso crees que soy estupido... Se que estas marcas se acaban, porque gastar una para que la mates cuando puedo hacerlo yo mismo...

En ese momento, aquel hombre enfoco la mirada en la niña mientras de ella algunas lagrimas empezaban a dezlizarse por sus mejillas, Kyuzo no hizo mas que observar, no planeaba intervernir aunque deseaba hacerlo.

Invitado

La ley de la regla del Santo Grial dice que "No puede haber testigos, y si los hay, deben ser eliminados.

Intenrrumpio hacercandose lentamente a aquella niña mientras sacaba una navaja.

Ademas somos dos testigos nada mas, y los muertos no hablan...

Nuevamente interrumpio, por su parte Kyuzo cerro los ojos momentaneamente, haciendo aires notables de concentracion, durante aquellos momentos un silencio sepulcral comenzo aflorar en los alrededores de la estancia, para cuando Kyuzo aclaro nuevamente la mirada, susurro de manera casi inaudible unas palabras mientras sin compasion alguna, sentenciaba aquella escena...

Querras decir... un Testigo.

¿¡Que!?

Para cuando su Master pronuncio aquellas palabras y se dispuso a voltear una katana yacia clavada en su corazon, sin mas este cayo al suelo, su rostro descibia un gran sentimiento de confuncion ak ni tan siquiera sentir dolor, habia sido acesinado casi imperceptiblemente.

Invitado

Kyuzo recojio fugazmente aquella katana nuevamente, aun le quedaba algo de mana antes de desaparecer por lo que enfoco nuevamente la mirada en aquella niña quien a pesar de no estar tan asustada ahora, estaba bastante sorprendida.

Vete a casa y olvida todo...

Para cuando dijo aquellas palabras la figura de Kyuzo se habia disfuminado, desapareciendo en la oscuridad de la noche, adentrandose hacia el bosque